
Este año promete ser año de cambios. Cambios que al principio duelen y no parecen buenos. Pero prefiero pensar que si suceden es porque son necesarios y algo bueno han de traer al final aunque ahora no lo pueda ver.
Quería ser espontánea y aprovechar unos días extras que han surgido de repente y hacer una escapadita. Despejar mi cabeza y romper la rutina por unos días para ayudarme a empezar nuevos ciclos. Pero no ha podido ser. No he podido encontrar vuelos baratos de un día para otro. No sé cómo se lo monta la gente para hacerlo. Cuando lo cuentan parece fácil eso de pirarse de un día para otro.
Me he dado cuenta de que cuando el rio suena realmente agua lleva y de que las personas pueden tener muy engañado a uno. Lo he visto en una compañera de trabajo cuando se han descubierto sus planes ocultos. Gente que va de amiga y en realidad es tu enemiga, y esos son los más peligrosos: los infiltrados.
También he visto que por muy listo, inteligente y maduro que te creas todos podemos ser manipulados. He notado esas influencias en mí, haciéndome dudar y también en cómo una de las personas más cercanas a mí se ha ido a años luz de distancia manipulado de forma muy sutil por su pareja.
No soporto a la gente que usa el autoelogio en negativo. Cosas del estilo de «no es por vanagloriarme pero…», «no pretendo venderme ni elogiarme pero soy mucho más de lo que ves…» Pues si eres mucho más ¿porqué no lo muestras? Ah, espera, espera, que te reservas para los «elegidos», o mejor dicho: si no soy capaz de ver lo maravillosa y grandiosa que eres el problema está en mí ¿no?. Esta sí que es buena…
Y entre todo este destapar caras ocultas destaca de forma pura, inocente y esperanzadora la forma en que mi sobrino de tres años me dijo ayer que me quería mientras pintábamos. Inventando una nueva expresión, de manera espontánea y propia me suelta: «Te amoro tía Elena». Cuando le pregunté que qué quería decir me respondió que «es de amor, tía Elena». ¡Me lo hubiera comido! Qué bonita y necesaria bocanada de ternura.
Sí… este año promete cambios.