Cuando era pequeña, televisaban alguna vez los dibujos de Betty Boop. Aunque aún no entendía muy bien los misterios de la dulce Betty, ni su psicología, con esa vocecita que tenía, me encataban.
Un artículo que decía que este 13 de agosto Betty Boop cumplía 80 años me ha traido al recuerdo a la memoria.
Betty Boop fue el primer dibujo mujer sexy. Basada en un tipo de mujer que surgió en los años 20 y que era políticamente incorrecta, se atrevía a entrar en los bares y beberse un licor, escuchar jazz y podía ser mordaz y elocuente, atreviéndose a ser libre y ella misma en una época donde las apariencias lo eran todo.
La sexy Betty Boop juega con su sensualidad. En algunos episodios (Algunos Trapos año 1932 y Pobre cenicienta en el año 1934) los estudios Fleischer dibujan a nuestra protagonista perdiendo la parte de arriba de su vestido, dejando ver su ropa interior, que en aquella época era un corpiño. En otros episodios se le levanta la falda (Caperucita roja mareada 1931) y en otros deja ver su silueta cuando pasa por delante de un fuego o una luz. ¡Todo un escándalo para aquel tiempo!
Me gustan los rompedores y los que saben desafiar con inteligencia. ¡Bien sexy Betty Booop!
Aquí se está muy bien. Quizás demasiado. La languidez se va apoderando de mí y me hace recluir más en mi nuevo mundo, aún desconocido, pero lleno de armonía.
Embebida en los placeres de la vida sencilla me doy cuenta de como se produce la metamorfosis de mi vida. -De cuantos potes de cremas tenía a medias, geles, maquillajes… No llegando a gastar ninguno y comprando nuevos sin parar… Qué inútil-. Ventaja: pasará tiempo hasta que necesite comprar productos nuevos.